- No se consume cerveza que requiere de un transporte previo para acabar en mi mesa. Menos aporte de CO2.
- Puedo preparar lotes según la materia prima de temporada.
- Fomento de la agricultura de cereales.
- Los envases se reutilizan y reciclan.
Contras:
- Algunos ingredientes no los encuentro de Km 0 o "slowfood"
- Los bares tradicionales tienen poca variedad en su stock.
Cerveza Artesana Casera
Hoy Domingo, estoy cocinando esta receta de cerveza; una American IPA con un montón de lúpulo porque es lo que me gusta.
Macerado: Infusiono a 65º la mezcla de maltas durante una hora.
Estas maltas no son más que granos de cereal de cebada con diferentes tiempode tueste o malteado y luego triturados.
Lavado: Mientras dejo escurrir la malta ya macerada, infusionada, aprovecho para lavarla más y así extraer todos los azúcares presentes en ella.
Estos azúcares están presentes en la cebada, porque son granos escogidos cuando han comenzado a germinar entonces en su interior almacenan una pequeña cantidad de glucógeno que expulsan cuando llevan un tiempo a una temperatura muy constante de 65º.
Hervido: El caldo que obtengo lo hiervo a 101 grados durante 60 minutos, y durante este tiempo incorporo el lúpulo en cantidades determinadas y en tiempos diferentes según la estructura de sabor que quiero en mi cerveza.
- Amargor: Son los lúpulos que darán ese aspecto a la receta, los agrego al principio del hervido (en esta receta me coincide pero al menos han de echarse 60 minutos antes del final)
- Sabor: Los echo entre 15 y 10 minutos antes de que acabe el hervido.
- Aroma: Los incorporo justo al final, para que su aroma perdure en el caldo.
En este momento la higiene del equipo y del entorno reducirá la probabilidad de que ese caldo preparado para la levadura que yo he escogido, no se "contamine" con otra que exista en el aire. Para ello tengo que enfriar el líquido de esos 101º a 20º en un tiempo record.
Enfriado: Durante más de 20 minutos un serpentín dentro del caldo y con agua fría recirculando me ayudará a enfriarlo hasta una temperatura óptima para la levadura que trabajará mi cerveza.
Fermentación: Es el tiempo en el que la levadura convertirá el caldo en una apetitosa cerveza, es importante que esté a una temperatura constante y en los rangos más bajos de trabajo de la levadura. Varía entre 7 y 10 días, y se nota porque el fermentador deja de burbujear por su válvula. Es importante que el lugar escogido sea sombrío o incluso oscuro.
Dry hoping: Justo cuando quedan 3 días para acabar de fermentar o al final, echo unos gramos de lúpulo cuando el líquido esté a 15 o 16 grados, para que sepa y huela más... Esta acción no es obligatoria pero le da la personalidad a la cerveza.
Cold Crash : Ya acabada la fermentación y con el ánimo de clarificar y matizar el color de la cerveza, el recipiente fermentador lo mantengo unos días en la nevera. La teoría de fluidos recomienda esta acción, su objetivo es parar el fluido y decantar las defecaciones de la levadura.
Embotellado: Cambiamos de recipiente nuestra cerveza ya fermentada. Repartir la cerveza en botellas y ponerles chapa es fácil, salvo que
cada botella lleva una pequeña cantidad de azúcar, dextrosa o miel para
aportar la fuerza o CO2 a la cerveza.
- Priming: Va en gustos pero suele ser de 5gr de azúcar por litro de cerveza. Un factor de conversión nos ayudará a saber cuantos mililitros de una disolución ya preparada, tenemos que echar en cada envase o botella.
En botella deberá madurar durante 15 días como mínimo, aunque no aguante y la pruebe antes...
Esta es una pequeña orientación-guía sobre cómo hacer cerveza, y en el lío en el que te metes. Cuando abres la botella y saboreas tu obra, tu propio espíritu crítico te ayuda a leer y a liarte más en este arte.
Invitado: Mielero
Artesano espirituoso y co-propietario de 25 colmenas.
#10añosperseverando
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